LA SALUD CUÁNTICA Y LA CONCIENCIA Por Fernando Bernal Martín y Vicenta Alguacil Bonilla

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LA SALUD CUÁNTICA Y LA CONCIENCIA

Por Fernando Bernal Martín y Vicenta Alguacil Bonilla.

Creadores de la Kinesiología  cuántica.

Esta ponencia recoge, en síntesis, nuestro particular modo de ver y operar usando el campo cuántico universal como base y nexo y creemos que, manejando la conciencia con la intención. Con esta base, desde hace 6 años, enseñamos y realizamos nuestras prácticas profesionales con kinesiología cuántica, telekinesiología, biomagnetismo cuántico, remedios florales cuánticos, etc., etc. De manera sucinta, a continuación explicamos nuestra visión de que hay detrás de lo que hacemos en el terreno de las terapias y que es la conciencia para nosotros/as.

EL UNIVERSO.- El universo es la totalidad del espacio y del tiempo, de todas las formas de la materia, la energía y el impulso, las leyes y constantes físicas que las gobiernan. Resumiendo mucho, mucho, diremos que, si la teoría del big-bang es correcta y todo parece indicar que, por el momento si lo es, el universo es un campo de información cuántica que contiene básicamente ondas (energía) y masa (materia), ambas en muy diversas formas, además contiene la vida.

LA INFORMACIÓN CUÁNTICA.-  Es lo que contiene y da coherencia al campo cuántico que, a nuestro modo de ver, es todo el universo. Es decir, es todo lo que hay en el universo y no es ni ondas (energía), ni contiene masa (materia). Por poner un ejemplo, no exacto, si comparamos el universo con un océano, la información cuántica sería el agua.

LA SALUD.- Nuestro particular punto de vista sobre la salud, contiene algunos elementos muy clásicos como por ejemplo, que tienden a vivir más y a disfrutar de mejor calidad de vida, quienes cuidan de su salud activamente, se alimentan adecuadamente, hacen ejercicio apropiado, llevan una vida intelectualmente activa, son amorosos con su entorno y con su propio Ser y aceptan ser amados/as; creen, además, en la existencia de alguna forma de Ser o ente superior y encuentran que su vida y lo que hacen en ella y con ella tiene sentido. En definitiva disfrutan de SALUD quienes viven en armonía con su entorno y para ello es esencial que la armonía con lo cuántico sea efectiva.

LA ENFERMEDAD.- Desde nuestro punto de vista actual, lo que denominamos enfermedad, podría verse como un estado de desconexión o alteración, mas o menos severo, entre el individuo enfermo y el campo cuántico personal, colectivo y universal lo que además conlleva diferentes estados de alteraciones emocionales. Desde nuestra perspectiva actual, curar, sanar, recuperar la salud…, podemos definirlo como el resultado de facilitar información cuántica a un sistema alterado para que recobre su equilibrio cuántico. Sobre las causas y lo que conlleva la salud, desde la perspectiva de las necesidades evolutivas y vivénciales del Ser, creo que hay un enorme abanico de posibilidades como sus objetivos kármicos, los propósitos del Ser para la actual encarnación, las necesidades vivénciales y experienciales de la conciencia y a veces, también las puramente orgánicas biológicas, etc. Creo la perspectiva que propone la Psiconeuroemoción a propósito de la enfermedad es bastante aceptable, pero también creo que eso no lo es todo.

LA INTENCIÓN.- Diferentes estudios sobre la naturaleza de la salud y la sanación realizados en el final de los años 90 y primeros años de este siglo (1), indican que la intención cura por si misma y que la curación es una fuerza individual y colectiva. A estas alturas, podemos asegurar que el trabajo que realizamos muchos terapeutas, sugiere la existencia de una especie de memoria colectiva con efectos sanadores y que puede ser convocada, usando la intención, como una potente fuerza de sanación. En este sentido, cabe citar los trabajos del biofísico alemán Fritz Albert Popp en los que sugiere que la curación podría ser cuestión de reprogramar las fluctuaciones cuánticas individuales para que operen con más coherencia y en armonía con la información cuántica del individuo y del campo cuántico universal. Por ello diré, que desde mi punto de vista, en el trabajo terapéutico, es tan importante la intención como los métodos o técnicas que empleo. Para mi es evidente que mis buenas intenciones y mi amor, respecto de mis pacientes, son esenciales cara a los resultados.

LA CONCIENCIA.- Sostenemos que es o coincide con el campo de información cuántica universal. Estamos adentrándonos cada vez más y más en el siglo XXI y a estas alturas seguimos sin saber explicar, a ciencia cierta, que es la conciencia y si esta se ubica en algún lado. Hay investigadores que directamente niegan que exista la conciencia. Otros, la consideran una extensión de las funciones de la mente. Algunos,  por su parte, la confunden con el inconsciente, con la cognición, etc., etc. Por nuestra parte y como fruto de nuestro trabajo de investigación y de la reiterada practica clínica con kinesiología cuántica, entendemos que, hay muchas y muy diversas formas de conciencia y podríamos hablar de la conciencia universal que atañe a todos los seres vivos, la conciencia colectiva que es particular de los seres humanos,  la conciencia cultural, la nacional, la regional, la local, la familiar, etc., etc. y por ultimo la conciencia individual, la personal, que además de estar imbricada con todas las anteriores, es característica de una sola persona. En síntesis, para mi la conciencia es la parte esencial de cada Ser, lo inmortal, lo que le conecta con todo el universo, es intangible e incorpórea, no tiene una ubicación precisa en los organismos, pero exista y hace sus funciones.

LA KINESIOLOGÍA CUÁNTICA.- Novedosamente,  propone un nuevo paradigma de la salud diferente a los clásicos y alternativos. Al basarse en que el universo es un campo de información cuántica y por ende, todo ser vivo y también los seres humanos, somos parte de ese campo y el equilibrio de nuestra biología depende absolutamente del estado de nuestra configuración cuántica, por consiguiente la armonía de nuestro equilibrio cuántico es esencial en nuestros estados de salud y enfermedad. En otras palabras: para que nuestros átomos, moléculas, tejidos, órganos, sistemas, etc., puedan funcionar individual y colectivamente, de manera eficaz y en lo que conocemos como estados de salud, es imprescindible que nuestra información cuántica este en armonía dentro del propio organismo y respecto del universo entero. El campo de información cuántica y la información cuántica, per se, ayudan a mantener sanos a los seres vivos y cuando el orden de esta información cuántica se ve alterado, esto afecta negativamente a su salud.

Usando sencillos test de kinesiología cuántica, podemos determinar de manera instantánea, in situ o a distancia, si un ser vivo está afectado por cualquier patógeno como hongos, parásitos, bacterias, virus, etc. Podemos determinar igualmente y con gran aproximación los niveles de vitaminas, proteínas, oligoelementos, hormonas, etc., presentes en su sangre en  cualquier otro fluido, en cualquiera de sus tejidos, órganos, glándulas etc. Así mismo y en aplicaciones para el masaje, la osteopatía etc., podemos localizar cualquier tipo de lesión o alteración estructural y la causa que lo ha originado. A diferencia de otras formas de testaje, diagnostico y tratamiento, la kinesiología cuántica además de señalar los estados de la salud,  puede indicarnos, sin lugar a dudas, cual es la causa de dichos problemas y cual ha de ser el camino terapéutico para poder resolverlos.

A la luz del nuevo enfoque que proporciona la kinesiología cuántica y por partir de un paradigma y un “modus operandi” diferentes, donde la conciencia se erige en la esencia del Ser y no la mente, como venia sucediendo, muchos/as de las personas que trabajamos en este campo, tenemos una visión muy novedosa de los problemas de salud, sus causas, sus interrelaciones y el modo de abordar los tratamientos. Además, los resultados que estamos obteniendo, después de más de 6 años de práctica docencia y discusión, avalan todo lo que explicamos aquí.

EN SÍNTESIS:

Todo lo que hacemos y manejamos en el ámbito de la kinesiología cuántica y la telekinesiología, se resume en que:

A determinados efectos, el universo funciona como una enorme “base de datos” que llamamos información cuántica y a la que accedemos, desde la conciencia con la intención. Con estos elementos realizamos nuestros trabajos de kinesiología cuántica y telekinesiología y guiados por las conciencias de terapeutas y pacientes, de aquí extraemos los recursos sanadores que empleamos.

(1)    Elisabeth Targ y William Braud, citados en “El campo” por Lynne Mctarggart